martes, 12 de mayo de 2009

Abrazos


Acabo de regresar a mi casa tras otro despiadado turno nocturno de esos de ocho horas que parecen sesenta. Ahora las tinieblas ya han dejado paso a la tímida luz solar del amanecer y yo, cual lechuza, me voy a dormir. Sólo los vampiros y gente así hacemos estas cosas de dormir de día, al revés de todo el mundo. Esta noche una de mis rondas me ha llevado hasta la azotea del edificio que estaba vigilando y ahí me he encontrado con la noche. Arriba sólo estaban las estrellas y la luna ascendía entre dos torres gemelas que la enmarcaban como empujándola hacia el cielo. Ahí estaba la vieja luna mirándome menguante haciendo crecer a los recuerdos... la vieja luna vigía de los sueños de la bella durmiente. Suelen decirme, en ocasiones, que al escribir un poema soy demasiado clásico ya que busco la rima de la composición clásica de los sonetos. A mi me gusta así pero también he escrito algo más moderno. Lo escribo aquí por si os gusta:

"Abrazos"

"Hoy he vuelto a sentir la suavidad de tu piel
Como un milagro, como la luz de la luna
Esta noche he vuelto a contar los brillos de tus pupilas
Como si contara diamantes, como una lluvia de estrellas

Cada día se hace más dulce el sabor de tu abrazo
Como un renacer, como el agua para el desierto
Cada reencuentro es más suave el néctar de tu miel
Como tu despertar cuando mi canción aún te acuna"

(A Maggie)


Al final no pude evitar rimar los dos versos primeros con los dos últimos

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Espléndido. A veces la rima es una prisión. Los sentimientos no se pueden compartimentar, clasificar en celdas.
Un abrazo.

entrenomadas dijo...

Jo, a mí me gusta. Tú rima que yo leo y además disfruto.
Un abrazo,

Marta

Raúl G.R dijo...

Estoy de acuerdo con 39 escalones. En ocasiones la métrica limita a la hora de plasmar sentimientos. Un saludo.

Marcos Callau dijo...

Es cierto 39escalones y manchas de tinta... por eso, a veces, es bueno una "gran evasión" hacia poesía sin métrica. Muchas gracias Marta.