Mostrando entradas con la etiqueta Garson Kanin. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Garson Kanin. Mostrar todas las entradas

miércoles, 12 de enero de 2011

My favorite wife (Garson Kanin. 1940)


Leo McCarey produjo esta comedia, perteneciente al género conocido como screwball, para ser dirigida por él mismo. Al sufrir Mccarey un accidente, el guionista Garson Kanin se puso a la dirección de una de las comedias que yo recuerdo con más cariño y más devoción en la historia del cine. La química entre la pareja protagonista formada por Cary Grant e Irene Dunne son el gran hallazgo de esta película delirante, con ingeniosos y vertiginosos diálogos y con una galería envidiable de secundarios en los que podemos ver a Randolph Scott o el irrepetible Donald MacBride, desconcertado dueño de un lujoso hotel.

Cary Grant, que ya había empezado a labrarse una estupenda fama para el screwball en "La fiera de mi niña" dos años antes o en "The awful truth" (también con Irene Dunne y Leo McCarey), se confirma aquí como un excelente maestro intérprete de la típica y brillante por otro lado comedia norteamericana. En "My favorite wife" Nick (Cary Grant) se casa con su novia Bianca (Gail Patrick), un año después de perder a su primera esposa y darla por muerta. Justo, el día de la boda, reaparece Ellen Arden (Irene Dunne), su primera esposa, en la casa de Nick, cuando éste se dirige a pasar la luna de miel al mismo hotel de su última boda. Ellen, algo indignada, se dirige al hotel y se hospeda en otra habitación. La secuencia en que Nick ve a Ellen, desde el ascensor mientras se están cerrando las puertas, es ya memorable en la historia del cine y millones de veces imitada como, en general, toda la película. A partir de entonces, el enredo y la confusión de Nick que, todavía enamorado de su primera esposa, no encuentra el momento adecuado para comentarle el problema su segunda esposa. El caso es que Ellen, todo ese tiempo que había estado desaparecida, lo pasó en una isla desierta junto a Stephen Burkett (Randolph Scott) quien también reaparece para mayor frustración y mosqueo de Nick. En enredo está servido y Nick perderá los papeles de manera gradual en cada escena que pasa hasta legar a ser denunciado por bígamo.

Esta película ha sido a lo largo de las décadas imitada, incluso plagiada sin ningún miramiento, pero está claro que es necesario su visionado para comprender por qué este tipo de screwball comedies están tan bien consideradas. A mí, sin lugar a dudas, es de las que más me hacen reír, todavía hoy, con el paso del tiempo. Por último me gustaría destacar que Robert Wise formó parte del equipo de montaje junto a Rudolph Maté. Así que, como vemos, el rodaje estuvo plagado de estrellas. Así no pueden salir las cosas mal...

Trailer: