jueves, 28 de enero de 2010

"El último refugio" (Relato corto)


"Hace aproximadamente dos años recuerdo que descubrí en mi ciudad un escondido y olvidado reducto para el jazz, un lugar donde los recuerdos se materializan en lágrimas de alcohol resbalando por las curvas sonoras de un ahogado saxofón. Allí, tras doce horas de monótono trabajo, reposaba mis huesos sobre una oscura caoba barra de bar tratando de materializar el caoba de aquéllos ojos que esas noches no podía más que soñar. Trago a trago y nota a nota conseguía calentar el cuerpo enfriado por el crudo y solitario invierno, y reconfortaba un maltrecho corazón que se agrietaba a cada suspiro que bombeaba. Aquél lugar se llamaba apropiadamente "Ragtime" y la dulzura que emanaba un lejano piano compensaba la amargura de no tener su cercanía. Allí, con la amable conversación de un simpático y apiadado barman y con las dulces baladas de jazz, podían dar las tres de la mañana que yo ni siquiera me inmutaba. Ya podía incluso amanecer que en mi noche eterna seguía reinando la tiniebla sin luna. Así, unas noches, despistaba a la madrugada en brazos del alcohol. Otras noches, sin embargo, mis calles grises me dirigían a un club de jazz donde tocaba un viejo alcohólico pianista apodado "maestro" al que yo le auguraba, apenado, pocos días más de vida. A pesar de la extrema vejez de su cuerpo y la gran cantidad de alcohol que habitaba en su estómago, aquéllos huesudos y alargados dedos seguían tocando el jazz de su piano de forma vertiginosa y magistral. También fueron innumerables las madrugadas que desheché en ese oscuro local lleno de niebla artificial provocado por el sueño irreal de un viejo desamor carcamal.

Al cabo de los años he regresado a esas calles del olvido y allí, como siempre, he recordado que la música de jazz te ayuda a terminar las cosas que salen mal para volver a empezar de forma elegante resurgiendo de tus propias cenizas, o de las cenizas de aquél cigarrillo a medio fumar. Las cenizas, al contrario de lo que cree mucha gente, no se las lleva el viento pero sí que te ayudan a aprender y te hacen más sabio. Con lo cual, la nueva vida siempre es mejor que la difunta. Paso a paso volví al "Ragtime" con la sóla idea de refugiarme en el último reducto donde se puede soñar con volver a empezar. Allí, irónicamente, volví a encontrar al "maestro" pianista que había sobrevivido a su última tormenta de whiskey y que estaba como nuevo, con su impecable traje gris y sus largos y huesudos dedos abrazados a una nueva copa de un ligero brillo extraño. Allí, también, encontré una mirada que me traspasó para llegar a ese lugar donde nadie antes había llegado y entonces creí en ese "volver a empezar" que, por ejemplo, nos propuso Garci hace ya algún tiempo. Yo arrastré a aquélla chica a mi bulevar de los sueños rotos y juntos forjamos los nuevos sueños sobre los que construir el mañana soñado. Entonces advertí cuánto tiempo había perdido en la barra del bar acodado."
Sarah Vaughn("The shadow of your smile"):

He creído conveniente esta canción para ambientar...

"RAGTIME" es un Pub de Zaragoza que no deben dudar en visitar para disfrutar del mejor jazz. C/ García Galdeano, 8.

martes, 26 de enero de 2010

Campo de sueños (Phil Alden Robinson. 1989)


Soy consciente amigos bloggeros de que al dedicarme al mundo del cine raramente deposito mi confianza en una película de finales de siglo XX y menos aún del siglo XXI. No obstante de vez en cuando suceden inesperadas sorpresas que le hacen a uno sonreír, recobrar la confianza y encontrarse en definitiva mucho mejor que ayer en el instante de irse a dormir. Nunca es tarde para dejarse convencer y volver a soñar con un mundo irreal más parecido al que nos gustaría vivir, ese planeta donde se pudiera recuperar el pasado que nos quedó pendiente en el tintero, pendiente de arreglar, ese pasado que en la realidad ya no existe. Al ver esta película, al fin bien traducida en su título español, debemos entender que se trata de algo mágico, realmente irreal y hay que estar predispuesto a mirarla con los mismos ojos que vimos "Retrato de Jennie", "El fantasma y la señora Miur", "¡Qué bello es vivir!" o "Horizontes perdidos". Se trata de creer, creer que la muerte no es muerte sino un pasaje a otra clase de existencia, creer en los sueños y luchar por ellos. "Campo de sueños" es un bálsamo en el que se nos ofrece una eternidad distinta a la que nos explicaron en el colegio, una eternidad que reside en los sueños, que aquí no parecen tan intangibles. Luchar por esos sueños precisamente es lo que hace Ray Kinsella (Kevin Costner), un padre de familia que vive con su mujer y su hija en una tranquila choza de Iowa donde cuida de una importante plantación de maíz. Un día cualquiera este sencillo granjero recibirá una señal, una voz que interrumpe la recogida de la siembra en una apacible tarde de verano. Esa voz, de la que se desconoce la procedencia, le dice que debe construir en mitad ("Si lo construyes, vendrá") de su plantación un campo de béisbol para "aliviar su dolor". Parece ridículo que un hombre deba destruir la mitad de su fuente de ingresos para llevar a cabo una empresa tan incoherente pero, después de todo, esa voz bien pudiera venir de su interior y bien pudiera tratarse de cumplir un sueño. Así Ray construye un campo donde rápidamente comienzan a suceder fenómenos muy extraños. La primera señal sucede en una tranquila noche de verano de un domingo cualquiera. Cuando el sol se ha ocultado tras la última montaña los focos del campo de béisbol iluminan a Joe "El descalzo" Jackson (Ray Liotta), un antiguo jugador que no pudo llegar a completar su sueño y fue retirado de la liga de béisbol. Pero Joe "el descalzo" aparece en ese campo, joven, con toda su vida por delante.

La voz misteriosa vuelve a aparecer y va guiando a Ray por todo el país en busca de todo el mundo que tenga pendiente un sueño por cumplir. Así conoce en Indiana a Terence Mann (James Earl Jones), un famoso escritor que ha perdido la fe en todo lo que escribía.

Ray convence a Terence para que le acompañe en busca de Moonlight Grahame (Burt Lancaster), otro jugador retirado que por la mala suerte del destino nunca llegó a batear y convertido después en un respetado doctor.

Así, atando cabos, finalmente Ray Kingsella llega a comprender porqué tuvo que construir el campo. No fue por Moonlight Grahame ni por Joe Jackson. Tampoco fue por Terence Mann. Tan sólo fue por él mismo y por su padre al que perdió demasiado pronto como para demostrarle lo que hoy le echa de menos. El papel interpretado por James Earl Jones es genial, no menos que el desempeñado por Ray Liotta. Pero si hay un papel emocionante, que llega al corazón, es el de Burt Lancaster como Doc "moonlight" Grahame. Es un papel escueto pero digno de un Oscar. Kevin Costner hace un gran papel protagonista y, lo más difícil de todo, hace que te lo creas. "Campo de sueños" ("Field of dreams") es una joyita escondida a finales de los años ochenta.
No comprendo cómo una película sobre béisbol me puede gustar tanto sin tener ni idea de béisbol. Es como si yo hiciera una película en la que construyo una nueva Romareda en mi casa para que vuelva a jugar Nayim con el paquete Higuera... Pero probablemente me gusta tanto esta película porque, en el fondo, no trata sólo de béisbol.

Trailer:

lunes, 25 de enero de 2010

Cita con...39 escalones, Alfredo Moreno, en la FNAC

Mañana martes 26 de enero tendrá lugar en la FNAC Zaragoza de Plaza España la proyección de "Smoke"(Wayne Wang. 1995) a las 18:00. Después de la proyección, a las 20:00, tendrá lugar el coloquio coordinado por Alfredo Moreno y organizado por la Asociación Aragonesa de Escritores. Así se inaugura un ciclo donde cine y literatura se dan la mano, "libros filmados".
Más información en: 39escalones.wordpress.com
y entrenomadas.wordpress.com

domingo, 24 de enero de 2010

Cita literaria con Roberto Malo en la Biblioteca de Aragón de Zaragoza

Mañana lunes, 25 de enero, a las 19:30 tendrá lugar en el Salón de Actos de la Biblioteca de Aragón (C/Doctor Cerrada) una charla a cargo de Roberto Malo donde hablará de los libros que han marcado su vida. Es un Acto de la Asociación Aragonesa de amigos del libro.
Más información en robertomalo.blogspot.com

sábado, 23 de enero de 2010

La Puerta del Carmen



"¡Qué colosal te elevas
puerta de piedra ultrajada!
por balas de fusil agujereada
ofreciendo una resistencia afrancesada
pero aquí te clavas extática, estancada

Ahora giro un instante
y puedo verte pegadita a él
al famoso y viejo Café Levante
que hoy se levanta en otra calle lindante
guardando tu memoria más brillante

En un tiempo fuiste nueva
puerta de entrada a tu ciudad
Hoy tu silencio pétreo aprueba
que no fuiste sólo un portal
Tu silencio a prueba de balas
que prueba una resistencia colosal

Hoy paso justo por delante
y no sé qué me pasa al mirarte
que me gustaría poder traspasarte
y a otro tiempo así viajar

Añoro el pasado
y el ayer no vivido
pero no tu pasado
no, ni el que has resistido
Quiero un pasado
que me devuelva
lo que hemos perdido."



Hoy el Café Levante se encuentra en la Calle de Almagro Nº4

viernes, 22 de enero de 2010

Mis libros favoritos: "El dibujante de nubes" (Richard Rayner)


Richard Rayner, nacido en Bradford (Reino Unido), es un escritor afincado en Los Angeles y colaborador habitual en The New Yorker y The New York Times. Es el autor de las novelas "Murder Book", "The blue suit", "The Elephant" y "L.A. without a map" que contó con una versión cinematográfica protagonizada por Johnny Deep y Julie Delpy. Yo llegué a él cuando me regalaron su última novela: "El dibujante de nubes". Este libro en sus 557 páginas es absolutamente apasionante. Richard Rayner narra la historia de Esko Vaananen, un soñador finlandés nacido a finales del siglo XIX que muy pronto desarrollará su pasión por la arquitectura a la vez que la pasión por la mujer de su vida, Katerina Melisheva. El amor por Katerina le empuja a olvidar su vocación arquitectónica casi por completo y a tomar partido activo en la guerra por la independencia finlandesa donde resulta herido de gravedad. Más tarde, en la posguerra, al dar por muerta a Katerina contrae matrimonio con una mujer a la que no ama y a la que abandona cuando recibe noticias de que Katerina sigue viva, en Nueva York. Esko, siempre persiguiendo ciegamente sus dos sueños, viaja a la Nueva York de los años veinte donde rápidamente se hace un hueco en el despacho de un arquitecto. En Nueva York Esko entra en contacto con el jazz, el alcohol de contrabando, las chicas que bailan al ritmo de swing y finalmente consigue construír para el poderoso y respetado gángster Joe Mantilini. La relación con Joe le llevará a conocer al multimillonario Andrew McCormick, para el que también construye y que resulta ser el marido de Kate (su amada Katerina de Finlandia). Hasta aquí puedo leer. Sólo decir que la novela me encantó. Cuenta con unas ingeniosas descripciones de los sueños del Esko niño, a través de su amarga infancia en Finlandia, más tarde consagradas en el Esko de juventud que continúa soñando. En Nueva York el libro gira hacia un ambiente más propio de novela negra que me enganchó hasta llegar a un más que digno desenlace final.

"El dibujante de nubes" de Richard Rayner (2001) ("The cloud sketcher")
Editorial: Alfaguara

miércoles, 20 de enero de 2010

Como el tiempo pasa...


"De un beso no se alimenta un querer
-es sólo eso- el pianista decía
mientras en su piano se consumía...
el llanto que no podía romper

-Una vela nunca deja de arder-
cantaba un soñador, una utopía
si vemos cómo el tiempo desafía
a esa estrella que vemos perecer

Es que en tus labios desaparecer
me parece un pecado, una herejía
cuando una caricia en tu piel se enfría
y mis huellas no tienden a volver

Que no entiende que pueda amanecer
mientras en la niebla se despedía
la dueña de su amor, con letanía
de luna que ya se cansa de crecer

Y el tiempo pasa y nada va a llegar
sólo un farol asombrándote en un bar
Quema el sol cuando te quiere desolar
Al final el tiempo arrasa tu lugar

Sombría avenida a la hora de cerrar
escena perfecta para derrumbar
los sueños convertidos en solar
brillando bajo un influjo lunar:
puede que no sea tarde para edificar
nueva vida de volver a empezar

Pero el beso es sólo eso, un suceso
muriendo preso en tu amor exceso."


"As time goes by" (Herman Hupfeld. 1931). Compuesta para el musical de Broadway "Everybody's welcome" fue adoptada como banda sonora de "Casablanca" en 1942 e inmortalizada por Sam, Dooley Wilson.

Frank Sinatra la canta en Sao Paolo, el quince de agosto de 1981 sobre el fondo de guitarra creado e interpretado por el magnífico Tony Mottola:

lunes, 18 de enero de 2010

"Little Caesar" (Mervyn LeRoy. 1931)


A estas alturas revisar una película que sentó las bases para el género del cine negro-policiaco-gangsteril es difícil teniendo en cuenta que, sin haberla visto anteriormente, ya se puede predecir la historia e incluso el final de ella. La historia contada por Mervyn LeRoy sobre la novela de Burnett, su primera película, ha sido muchas veces expuesta en el cine pero no siempre con el acierto que tiene esta auténtica joya de los años treinta. Contemplando aquí el papel desempeñado por Edward G. Robinson como Rico Bandello es fácil predecir en él a la gran estrella en que después se convertiría. Su papel tiene la fuerza y agresividad que se necesita de un "pequeño César" del mundo del hampa y el dominio endeble de un hombre sádico que llega a la cima, desde el arroyo, demasiado rápido. Es un papel que Edward G. representa a la perfección (a pesar de su estatura) y que catapultó a la fama a este rumano de orígen judío que se formó en Broadway. Edward G. Robinson a partir de entonces se convirtió en el gángster perfecto y despiadado que en la pantalla podía rivalizar con el mismísimo Cagney. La historia es trepidante, sin pausas y contada con la mayor claridad posible. LeRoy se recrea en los primeros planos del malvado Bandello cada vez que aprieta el gatillo de su revólver y se recreará más tarde, hacia el final de la cinta, en un primer plano que nos muestra a un Bandello distinto, benévolo que perdona la traición de un amigo...Estas escenas son memorables. La película cuenta con la presencia de Douglas Fairbanks Jr. (el hijo del mítico espadachín y saltarín del cine mudo) como el amigo de Bandello, Joe Massara, que se resiste a pertenecer al oscuro mundo del hampa. Glenda Farrell es Olga Stassoff, bailarina de nightclub y novia de Joe. Además el elenco de secundarios es, como siempre en estas películas, inmejorable. Una película que en 1931 causó furor y que llega a nuestros días conservando aún lo mejor de ella.

viernes, 15 de enero de 2010

¿Qué significa ver?



El mendigo y la florista

"El hombrecito que siente vergüenza
de sus ropas raídas y harapientas
también siente amor...por una florista
y temor... por que la humildad le venza

-Pero el hombrecito tiene corazón
Ahí no hay ricos, ni pobres, ni razón-

El hombrecito también es consciente
de que no puede cambiar la realidad
y a un mendigo es lo que ella va a mirar
sin ver lo que esconde su alma impaciente

Sólo una flor le quiere a ella comprar
y descubre que la florista es invidente

-El hombrecito tiene corazón
donde no hay ricos, ni pobres, ni razón-

Pero la florista invidente ve más allá
de sus ropas sucias y descosidas
Ve un corazón que late verdadero
que sabe llorar, que sabe amar
y el hombrecito ve en sus ojos la felicidad
y el corazón...
sin ricos,
sin pobres,
brilla como luces de ciudad."



Este texto va dedicado a una película maravillosa de Charles Chaplin titulada "City lights" en que nos cuenta la maravillosa historia de un mendigo enamorado de una florista ciega. No puedo decir nada excepto que la considero una obra de arte. Si hay alguna duda vean esta escena final en que la florista reconoce en el mendigo a su benefactor con cuya ayuda ella ahora puede ver. Ella creía que aquél hombre era rico y guapo, pero finalmente aquél hombre era él:

miércoles, 13 de enero de 2010

Pequeñas joyas del cine español: "Un millón en la basura" (José María Forqué. 1967)


El otro día tras finalizar mi turno de noche me dirigía a casa sobre un helado asfalto, bajo una luna fría como una sonrisa de nieve en mitad del cielo oscuro que la hacía parecer más lejana de lo normal. Eran las siete de la mañana y todo el mundo dormía aún. Una ligera nieve empezaba a caer y entonces pude observar a algunas personas que no dormían, que me acompañaban despierto a estas intempestivas horas como zombis cansados de estar despiertos. Eran personas vestidas con atuendos amarillos y naranjas fosforescentes que se dedican al noble y difícil oficio de mantener limpia la ciudad. Entonces pensé en esa época en que no vestían con esos trajes sino que lo hacían de negro inmaculado, portando una vieja y larga manguera, entonces pensé en uno de estos hombres encontrando un millón de pesetas en el cubo de la basura.
Vuelvo al cine español otra vez de la mano de José María Forqué en este caso para retratar las miserias de la España franquista. José Luis López Vázquez, en uno de sus papeles protagonistas que mejor recuerdo dejaron en mi mente, encarna a un barrendero que encuentra un millón de pesetas dentro de un maletín, en un cubo de la basura. Un millón de pesetas en aquélla España de los sesenta era bastante dinero y podía hacer salir de más de un apuro a cualquier familia del país. En concreto Pepe (José Luis López Vázquez) es un hombre que vive en la más completa miseria, en los arrabales de Madrid, junto a su esposa Consuelo (interpretada por Julia Gutiérrez Caba) y sus hijos. Al encontrar el millón de pesetas Pepe se debate entre aprovechar la situación y así pagar todas sus deudas o encontrar al dueño del maletín para entregarle lo que es suyo. Aquí José Luis López Vázquez nos presenta a un hombre inocente, decente y bueno que a pesar de su caótica situación económica se deja llevar por los consejos de su esposa Consuelo y así buscar al dueño del maletín. Es una película muy emotiva y realista donde José María Forqué se arriesga a mostrarnos lo peor de la España profunda y mísera del franquismo, las consecuencias de un régimen en un país que no se ha recuperado de la Guerra Civil. Esa España que nadie podía enseñar. El papel secundario de Juanjo Menéndez como Faustino, compañero de Pepe, es inmejorable y siempre quedará en mi mente una escena en la que Pepe acude al bar con un billete extraído del maletín que encontró en la basura. Así quiere averiguar si el billete que ha encontrado es falso o por el contrario es legal y le pregunta a sus amigos. Faustino examina cuidadosamente el billete a la luz de la barra del bar y dice: "Las firmas están bien, el color...pero mira el cajero... en éste el rabito del cajero está torcido". Las risas son inevitables. Eso es lo grandioso de la película que, tratando un drama social demasiado preocupante se puede también sacar el momento para la comedia. También hay una escena memorable en la que Pepe va a comer a un buen restaurante (probablemente por primera vez en su vida) con el dinero del maletín. La escena termina en la comisaría de Policía porque Pepe no se ha atrevido a pagar la cuenta con ese dinero. José Sacristán, Aurora Redondo, José Sazatornil y Rafaela Aparicio completan el elenco de secundarios inolvidables. Una película que merece la pena recordar, sin duda.

sábado, 9 de enero de 2010

Café del Trapalas


"El Trapalas sale a pasear de tarde
Su viejo traje raído no le humilla
camina el casco antiguo, llega a la orilla
pero el Ebro no está hecho para el cobarde

Vuelve sus pasos, busca un bar que lo guarde
A su lado siempre vacía una silla
como esperando compañía sencilla
algún corazón que a tiempo lo resguarde

No encontró su sitio y montó un bonito bar
haciéndose especialista en quemar el ron
quemó los recuerdos por todo ese lugar

Intentó componer una buena canción
pero el café le ayudó a dejar de soñar
no volverá a confiar en la redención."


"El Trapalas" es un bonito y antiguo bar sito en la Calle Mayor, 51 (Zaragoza). Su especialidad: el quemadillo de ron.

martes, 5 de enero de 2010

Cantos rodados (vuelta al soneto para la noche de reyes)


"La luna es hoy un redondo pomelo
que se desangra en mitad de un lamento
llenando de llamas el firmamento
en esta noche de incendiado cielo

Yo morderé tus labios de consuelo
para licuar mis sueños de cemento
en un momento de infernal tormento
fomento el desamor sin revuelo

Las orquestas de los desamparados
ya rompen formación por las aceras
cantando versos rotos y enturbiados

Marchan rodando por las carreteras
mis poemas como cantos rodados
rodando y rondando mis borracheras."


No crean que los cantos rodados son las rollin' stones de los americanos sino algunos cánticos robados desde el corazón hasta el frío asfalto.


Como curiosidad para desearles una feliz y mágica noche de reyes les hago un regalo en forma de tango de Carlos Gardel. Que vuestra noche de reyes sea muy diferente a la que nos relató el argentino:

sábado, 2 de enero de 2010

El señor Joaquin Sabina


Que Joaquin Sabina es un personaje que despierta tantas simpatías como antipatías ya es bien conocido por todos nosotros. Que a mí me despierta muchas más simpatía que otra cosa, también. Además es un hecho demostrado que sus letras, sus versos y rimas, inspiran a cualquier amante de la buena literatura. Pero hoy quiero destacar su último trabajo discográfico que, además de ser una buena propuestal musical, es una joya literaria en sí misma. "Vinagre y rosas" es el título perfecto para definir la sensación que nos produce escuchar entero el último álbum de Joaquin Sabina. Es un disco oscuro, crepuscular y altamente poético con versos y rimas inolvidables que provocan al que lo escucha tener ya un estribillo que tararear a la mañana siguiente. Acostumbrados a su estilo quizás es bueno reseñar que es un disco más sosegado que el resto, por lo que estamos ante el trabajo más parecido a "Diecinueve días y quinientas noches" que ha producido el jienense desde los años noventa hasta hoy. Muy superior a su último "Alivio de luto" contiene una música y unas rimas pegadizas así como baladas al estilo clásico sabinero con las que nos vuelve a sumergir en el maravilloso mundo de "¿Quién me ha robado el mes de abril?", "Que se llama soledad" o "Calle melancolía". Este caso es el de "Cristales de bohemia", canción dedicada a la ciudad de Praga (donde se compuso el disco), a la soledad, al desamor y a la luna... como una daga manchada de alquitrán. La primera vez que la escuché juro por el santo del desván que se me heló el corazón y se me puso la carne de gallina. La voz quebrada de Sabina es acompañada por un intimísimo piano y una acordeón que surge en mitad de la noche de Praga. En palabras de Joaquin Sabina para la revista "Rolling Stone": "Lo primero que he hecho ha sido contar más con poetas y menos con músicos. Los músicos son los de siempre, pero he hecho a medias ocho o nueve canciones con el escritor Benjamín Prado, a cuatro manos. Ni él ni yo sabemos qué verso es mío y qué verso es de él, pero sí que lo hemos pasado muy bien haciéndolo. Benjamín (Prado) lo pasó mal cuando su amante le dejó, así que me lo llevé a Praga y conpusimos esto...".



Ejemplos de letras inmejorables, podría poner muchas pero voy a deleitaros con mis dos líricas preferidas: "Cristales de bohemia" y "Nombres impropios". El primer single "Tiramisú de limón", de cualquier forma, ya lo dice todo. Es una canción que comienza tranquila para seguir in crescendo hasta un final completamente roquero. En el caso de "Agua pasada" escuchamos un soneto reconvertido en canción tranquilita y bohemia que comienza con ésta maravilla de estrofa:
"Lo peor del amor cuando termina
son las habitaciones ventiladas
el solo de pijamas con sordina
la adrenalina en camas separadas."

Pero no falta tampoco el toque andaluz sabinero con una rumba dedicada al desaparecido Ángel González llamada "Menos dos alas" y el toque del Sabina roquero con "Crisis" y "Embustera". "El blues del alambique, "Viudita de Clicquot" "Vinagre y rosas" y "Ay, Carmela" está dentro de lo más íntimo de Joaquin y eso a estas alturas ya es todo un regalo para los oídos. En cuanto a la participación del grupo "Pereza", sorprendentemente para mí, ha servido para darle frescura y un sonido roquero y jóven a un álbum redondo, sin fisuras, como un tapiz de aguardiente tejido con desamor. Ahora, lo prometido. Dos de las letras escritas por Joaquin Sabina y Benajmín Prado:

"Cristales de bohemia"
"Vine a Praga a romper esta canción
por motivos que no voy a explicarte,
a orillas del Moldava
las olas me empujaban
a dejarte por darte la razón.

En el Puente de Carlos aprendí
a rimar cicatriz con epidemia,
perdiendo los modales:
si hay que pisar cristales,
que sean de bohemia, corazón.

Ay! Praga, Praga… Praga
donde el amor naufraga
en un acordeón.
Ay! Praga, darling, Praga
los condenados pagan
cara su redención.

Ay, Praga, Praga, Praga,
dos dedos en la llaga
y un santo en el desván.
Ay! Praga, darling, Praga,
la luna es una daga
manchada de alquitrán.

Vine a Praga a fundar una ciudad
una noche a las diez de la mañana,
subiendo a Mala Strana,
quemando tu bandera
en la frontera de la soledad.

Otra vez a volvernos del revés,
a olvidarte otra vez en cada esquina,
bailando entre las ruinas
por desamor al arte
de regarte las plantas de los pies.

Ay! Praga, Praga… Praga
donde el amor naufraga
en un acordeón.
Ay! Praga, darling, Praga
los condenados pagan
cara su salvación.

Ay! Praga, Praga… Praga
donde la nieve apaga
las ascuas del tablao.
Ay! Praga, darling, Praga
lágrima que se enjuaga
en Plaza Wenceslao.

Ay, Praga, Praga, Praga,
dos dedos en la llaga
y un santo en el desván.
Ay! Praga, darling, Praga,
la luna es una daga
manchada de alquitrán."


(del maestro, Joaquin Sabina)

"Nombres impropios"

"No se puede afirmar
que me engañaba cuando me mentía.
se llamaba Osadía
y desde el primer día
tuvo la cobardía de avisar.

Quien tiene siete vidas
y dos ojos de gata callejera
no se va con cualquiera.
De su noche se espera
un broche de promesas incumplidas.

Mejor no equivocarse
no me pidas jamás lo que no doy
ya sabes cómo soy y si quieres me voy
dijo cuando acabo de desnudarse.

Ya ves
llegar a fin de mes
no era con ella asunto de dinero
se trataba más bien de merecer
un tren de pasajeros,
el tsunami de un mar hecho mujer
dispuesto en cada ola a renacer.
Se llamaba Herejía
cómo voy a saber
si me engañaba cuando me mentía.

Maestra en confundir
al diablo y al rey de los altares,
me citaba en los bares
con fuegos malabares
y luego se olvidaba de acudir.

La mañana y la tarde,
qué vaivén entre alarde y agonía,
todo lo confundía
su swing, porque sabía
mirar como un crepúsculo que arde.

Callada por respuesta
cuando jugué al dolor de corazón.
Su boca era un buzón de voz sin
compasión
dormido hasta la hora de la siesta.

Ya ves,
llegar a fin de mes
no era con ella asunto de intendencia.
se trataba más bien de comprender
la pura impertinencia
del sol cuando se cansa de asombrar,
del mostrador a la hora de cerrar.
Se llamaba ironía
y no puedo jurar
que me engañaba cuando me mentía.

Ya ves,
llegar a fin de mes
no era firmar un parte de sucesos,
se trataba más bien de envejecer
huérfano de sus besos
con fantasmas que aprenden a
crecer,
abrazos que se mueren por volver,
Se llamaba utopía,
me gusta imaginar
que me engañó cuando se despedía."


(del maestro, Joaquin Sabina, y de Luis García Montero)

Ahora les dejo con el video "Tiramisú de limón", junto a Pereza, y un video de "Cristales de bohemia" con imágenes de Praga:


viernes, 1 de enero de 2010

Feliz Año 2010

No entiendo porqué el mundo descubre hoy que existen las competiciones de saltos de esquí y la música de Johann Strauss. En cualquier caso que se cumplan vuestros sueños en el 2010. Feliz Año Nuevo.