viernes, 2 de diciembre de 2011

Los Secretos en el Principal

Ramón Arroyo, Santi Fernández, Jesús Redondo, Juanjo Ramos y Álvaro Urquijo

Trenes perdidos:


El pasado 17 de noviembre se cumplieron doce años de la muerte de Enrique Urquijo pero, cada vez que Los Secretos se suben a un escenario, en algún lugar vuelve a resonar la inolvidable voz del autor de temas tan históricos como Déjame, Ojos de perdida o Quiero beber hasta perder el control. Justo el día anterior, el pasado 16 de noviembre, Los secretos presentaron su nuevo álbum titulado En este mundo raro cuyo título ya nos remite inevitablemente al trabajo que Enrique Urquijo publicó con Los Problemas, y que precisamente se titulaba Un mundo raro. El concierto, que tuvo lugar en el Teatro Principal de Zaragoza, nos dió la oportunidad de comprobar que este grupo no ha perdido nunca su identidad, que sigue siendo el mejor exponente del Rock-country en nuestro país y que sigue siendo fiel a las primeras influencias de Jackson Browne, los Eagles o Neil Young. Porque, aunque en el documento de identidad de los hermanos Urquijo figure Madrid como lugar de nacimiento, si nos ceñimos a su música, podríamos estar ante dos hermanos nacidos en algún lugar de una carretera polvorienta entre California y Arizona. En este mundo raro nos vuelve a deleitar con ese sonido genuino y en su directo, con un sonido cada vez más perfecto, sobretodo en la sección acústica. Destacable, el tema de cabecera en esta entrada, Trenes perdidos, composición del teclista Jesús Redondo, Bailando con la luna y el tema que lleva el título del disco, compuesto por Álvaro Urquijo. Y el momento especial de la noche en el Principal llegó con el recuerdo a Enrique y la interpretación de No digas no, uno de sus clásicos en solitario. Los Secretos siguen ofreciendo buena música con una calidad incomparable.


Este mundo raro (Los Secretos 2011)



No digas no (Enrique Urquijo)

18 comentarios:

Asociación cultural Poetas de Bailén dijo...

Buena música. Para siempre. Aunque sean españoles, que algo quita. Somos así.

Un abrazo Marcos

Myra dijo...

Hola, Marcos. Me gustan mucho Los Secretos. Escuché en una emisora de radio que tenían nuevo trabajo y andan de gira presentándolo.
Estoy de acuerdo en todo lo que comentas en la entrada. Yo también veo esa influencia de Eagles.
Preciosa Trenes Perdidos. Para escucharla en tranquilidad, como para dentro.

Un beso

Pepe Cahiers dijo...

A mi me pasó que, cuando Los Secretos estaban en su máximo auge, no me interesaban demasiado. Algunos años después, cuando los escuchaba en un pub, me di cuenta que eran realmente buenos.

Manuel Márquez dijo...

A mí Los Secretos me gustan, compa Marcos, y los he seguido con regularidad a lo largo de su carrera; pero creo que lo de ahora, francamente y con todos los respetos, ya es otra cosa, que, además, por respeto a la memoria del finado Enrique, debería utilizar otro nombre (no es el primer caso, desde luego, pero no por ello me parece más admisible). Pero, bueno, en esto, como en tantas y tantas cosas, cada cual tiene su percepción.

Un fuerte abrazo y buen fin de semana.

roberto dijo...

No te pierdes una, amigo Marcos.

Yo vi a Los Secretos (con Enrique) en directo varias veces de joven.
Ahora en cambio, la verdad, ya no ando al tanto de casi nada...

Marcos Callau dijo...

Es verdad, Juan. No se suele valorar a los artistas en su tierra. Pero puede que Los Secretos sean una excepción. Un abrazo.

Es innegablñe ese sonido "fronterizo", Myra, que recuerda a los Eagles y a Jackson Browne principalmente. "Trenes perdidos" me llegó al alma diurante el concierto. Besos.

Realmente Cahiers a Los Secretos se les escucha más de lo que parece en los bares de marcha. Recuerdo las noches enteras que pasaba por los bares del casco viejo zaragozano. El emjor momento de la noche era cuando sonaban Los Secretos, sin duda. Un abrazo.

Yo creo, Manuel, que el sonido y la esencia sigue siendo el mismo, a pesar de esas canciones demasiado cercanas al pop más comercial como el tema aquel que se titulaba "Cada vez que tú me miras". Debe ser muy duro perder la esencia de un grupo legendario y más aún cuando esa esencia es tu hermano. Quiero ver a Los Secretos de ahora como un constante homenaje a Enrique. Eso sí, los tiempos de "Quiero beber hasta perder el control" o "Sobre un vidrio mojado" ya no volverán. Un abrazo.

Intyento no perderme nada. Eso sí, Roberto, tuve que abandonar el concierto en medio de los bises porque trabajaba de noches. Realmente tuviste mucha suerte de poder disfrutar de Enrique Urquijo y los legendarios Secretos que ya no volverán. Un abrazo, amigo.

miquel zueras dijo...

Huy, Los Secretos... cuántos recuerdos ochenteros me trae su "Déjame". Al principio no les tomaban en serio, les consideraron un grupo pop y blandengue pero al final la mayoría reconoció su calidad. Abrazos. Borgo.

Unknown dijo...

Agarrate fuerte a mi María que esta noche es la más fría y no puedo dormir.
Un abrazo Marcos

Licantropunk dijo...

Y su música no ha envejecido, pienso, quizá por lo que comentas de no circunscribirse a una época y localización (o sea, movida madrileña) sino por tener unos acordes más universales. Y aunque no estaban entre mis grupos favoritos, forman parte ineludible de la banda sonora de mi juventud, de eso no cabe duda: pocos cantaron tan bien al desamor como estos: hasta perder el control, carajo.
Saludos.

ethan dijo...

Ese tono melancólico inconfundible -y, como bien has dicho, con regusto a route66, pero llegando a California más que saliendo de Chicago- forma parte de la banda sonora de mi vida.
Un abrazo!

MucipA dijo...

Acabo de escuchar los temas que incluyes en este post y, sin duda, la esencia de "Los Secretos" sigue estando en estas canciones.
En este mundo raro nos empeñamos en no valorar a los grupos de nuestro país, pero por suerte algun@s sí los valoramos y nos sentimos satisfechos de tener buenos recuerdos cuando escuchamos a "Los secretos".

Un abrazo.

Marcos Callau dijo...

La verdad es que nunca he comprendido que no se les tome en serio, Miquel y tampoco los que lo tachan de "demasiado sentimental" Un abrazo.

La cantaron, Yuri, la cantaron. Algo diferente a Enrique Urquijo pero siempre la cantan. Un abrazo.

Es cierto lo que comentas Licantropunk. No tienen el típico sonido ochentero de otras bandas de la movida. Otra banda muyparecida fue Nacha Pop, aunqeu más Antonio Vega en solitario. Gracias por pasar.

En efecto, llegando a California Ethan jeje ¿Y quién no tiene una canción favorita de Los Secretos? Un abrazo Ethan.

Yo creo que sí que suena a "Secretos" todos sus temas actuales Mucipa. Gracias por dedicarte a escucharlos en esta entrada. Besos.

abril en paris dijo...

Un grupo de los que no pasa de moda porque tiene un buen directo y unas letras preciosas.
Es cierto..¡ todos tenemos nuestra cancion "secreta"!.

Besos Marcos :-)

ATTICUS dijo...

Yo no soy de musica española,siento no tirar para mi tierra,pero no me llegan,que le vamos a hacer,jejeje.
Aun asi estos son mejores que los actuales a años luz.
Un saludo Marcos

El Tirador Solitario dijo...

Es que en aquella época se hacía buen pop, una música muy agradable. Yo era más de Los Pistones, aquellos de El pistolero, pero la verdad es que estaban pero que muy, muy bien!

Marcos Callau dijo...

"Nuestra canción secreta". Muy bueno abril. Sus letras es también una de sus buenas bazas. Gracias por pasar.

Hola Atticus. Bueno, si algo tienen Los Secretos es que suenan como si no fueran españoles. Más bien, americanos. Saludos Atticus.

Hola Tirador. Los Pistones también tenían algo de sabor norteamericano, sobretodo en su nombre. Un abrazo.

39escalones dijo...

Estoy con Manuel; sú música, la de siempre, actualizada, es excelente, han crecido con el tiempo y conforme se han hecho mayores, aunque algunas letras ya no encajen con su edad. Pero desde la muerte de Enrique, y tras la catarata de homenajes, recopilatorios, tributos, etc., se va imponiendo un descanso a fin de no ser repetitivos, de no agobiar, de no acumular la novedad por la novedad en un legado clásico.
Un abrazo

Marcos Callau dijo...

Podrían tomarse un respiro, cierto es o Álvaro podría probar algo en solitario, pero bueno... merece la pena este último disco. Un abrazo.