Puerta del Duque e iglesia de San Miguel. Zaragoza antigua. |
Entre las orillas del mundo
"Los días se ralentizan aquí en San Miguel
esperándote en la terraza de este Café,
deshojando versos de Juan Ramón en papel
e intentando adivinar dónde acabó mi fe.
Seguramente el fondo en los ojos de Francina,
donde pasa el paisaje, donde se apresa el tiempo,
donde amanece y lánguido el ocaso culmina,
guarda el final del viaje, junto a la edad del viento.
Pero el paisaje no pasa ni pasa la vida
porque el mundo es una cárcel de estrechas orillas.
A un lado, el dorado viejo como vieja herida.
Cielo nocturno al otro, donde tú siempre brillas.
Pero basta de quimeras que ya va cayendo
la tarde y los autobuses rojos y fugados
se proyectan, mientras la ciudad va envejeciendo,
hacia una puerta inexistente, ya resignados.
Los primeros faroles dibujan incendiada
la noche y sobre la campana de los perdidos
crepúscula la luna, cual daga atravesada,
viene a iluminar el rostro de amores huidos.
¿Dónde estás ahora, dónde posas tu mirada?
Tus ojos melancólicos parecen estar
en ese lugar de la aurora más alejada
del lúgubre rincón donde te pude besar.
Creo que estás, esparcida por el firmamento.
Que eres estrellas, planetas, música callada.
Eres la carne, la flor, el beso y el lamento
cuando deshojas en mi boca esta encrucijada.
Ahora, la noche habita en todas estas calles
y eres la luna argentina, leve y escapada.
Deseo que ilumines mis más lóbregos valles
que me eleves al sol de la mañana dorada."
La fotografía es una antigua instantánea de la Plaza de San Miguel en Zaragoza. En ella se puede observar la Puerta del Duque, hoy desaparecida y pintada sobre una fachada. La iglesia está hoy prácticamente igual.
AÑADIDO NECESARIO:
Y al ser hoy el día que es, no quiero dejar al mundo sin la mejor canción de San Valentín que se ha compuesto. "La trompeta más triste del jazz", Chet Baker, grabó en estudio la mejor versión de "My funny Valentine" (Rodgers and Hart. 1937). La del siguiente video es de 1987 aunque, cómo no, siempre nos quedará Sinatra. Ahora, díganme ¿Sinatra o Baker?.
17 comentarios:
Y por qué no nos quedamos con los dos?
Ver un poema con métrica en un blog ya es muy difícil en estos tiempos en que los poemas libres son casi el 100 %.
Juan Ramón Jiménez es mi poeta preferido.
Tu poema hace honor al maestro.
Saludos.
Salta a la vista que la noche es tu mejor aliada, tus escritos se transforman en verdaderos lienzos de palabras y en este caso, ese amigo tuyo se sentirá mucho mejor al leer esta belleza.
Me encanta esa imagen Marcos..y esa canción inspira mucho en este día.
Vuelvo a dejarte besitos..
Me alegro Javier de haber estado leyendo a tu poeta favorito, aunque hablando de maestros así, es difícil no encontrar poemas con los que quedarse para toda la vida. Volver a releer a Juan Ramón ha sido toda una experiencia. Un abrazo. Por cierto, es una buena elección quedarse con los dos.
Hola Época. Muchas gracias por tus plabras y por acompañarme con tu ánimo. Besos.
Estoy de acurdo con la amiga Epoca que perpetras muy bien los versos con nocturnidad y alevosía. Estos alejandrinos estàn sobresalientes y haces muy bien en inspirarte en el maestro.
Qué pena que a esa plaza le quitaran ese arco tan precioso.
Naturalmente Chet es un broche de oro, especial para la ocasión.
UN abrazote.
Gran entrada para este día tan señalado... A disfrutar mucho.
Pues muchas gracias Antonio. Creo que los clásicos siempre deben ser recordados y la métrica nunca estará pasada de moda. La Plaza de San Miguel fue desprovista de su Puerta del Duque por la expansión inevitable de la ciudad. Un abrazote.
Muchas gracias Roberto. A pasarlo muy bien.
Hola, Marcos. Qué bonitas tus orillas y tus noches con su firmamento. La canción, maravillosa. He escuchado las dos versiones y parecen dos canciones distintas. La de Baker,muy intimista y la de Sinatra con su clásica elegancia así que, yo mr quedo con las dos.
Besos
Pues hacs muy bien en quedarte con las dos, Myra. Yo también, por eso he puesto las dos y conste que me gusta más la versión en estudio que grabó Chet Baker. Gracias por asomarte a estas orillas. Besos.
Tu acercamiento a los versos alejandrinos, cosa nada, nada fácil, es excelente, Marcos, tanto en la forma como en el contenido. Si me lo permites decir, tu composición tiene una fluidez, corrección y sentimiento, muy elegante. Me ha gustado mucho, todos somos parte de esas estrellas, igual que Ella, y algún día volveremos a ellas.
Conozco el blog de Fernando y su excelente poesía. Totalmente recomendable.
En cuanto al tema "My funny Valentine" me quedo con este fabuloso trompetista (de final tan triste), Chet Baker, sin hacerle ascos a Sinatra, pero Baker...es mucho Baker en este tema y en tantos otros.
He disfrutado mucho de tanto arte en tu entrada. Gracias por este bello post. Feliz día (noche ya) y un abrazo, Marcos.
Es un placer leer tu comentario, Marisa. Tus palabras son un honor para mí. Si conoces el blog de Fernando, poco puedo añadir excepto que sigamos leyéndole y disfrtuando de su poesía.
Mi debilidad es la tristeza en la voz de Sinatra pero nunca he encontrado una melancolía tan acusada hasta que escuché la trompeta de Chet Baker. Feliz noche también para ti y mil gracias. Besos.
La foto y los versos " mientras la ciudad va envejeciendo, hacia una puerta inexistente, ya resignados.." son la una para los otros. Un ejercicio de gran calidad Marcos.
Y el tema me ha encantado es verdaderamente otra canción. Menuda sesión de jazz..insuperable.
La de Sinatra es otra cosa, ni mejor ni peor es Sinatra con su dulzura romántica. Lo de Baker es jazz en directo y tiene otro ritmo... otro sentimiento.
Siempre aciertas, Marcos.
Un besito :-))
Muchas gracias, Abril. Esos versos que destacas están escritos antes de conocer la fotografía pero sí que fueron concebidos ante esa fachada donde comento que está dibuja la vieja Puerta del Duque. Muchas gracias y mil besos.
Hola, Marcos. Muy buen poema y necesario el recuerdo para Sender que ahora parece un tanto olvidado. Yo me quedaría con la música de Chet Baker y la voz de Sinatra para esta canción. Me la he puesto como fondo mientras tomaba un dry martini y aún me ha sonado mejor. Saludos. Borgo.
Juan Ramón Jiménez, amigo Miquel, que creo que está menos olvidado pero que siempre debe ser revisado. Mu buena elección como música de fondo para un dry martini. Hubiera sido algo estupendo escuchar esta canción cantada por sinatra mientras le acompañaba a la trompeta Chet Baker. Lamentablemente es aglo que solo podemos soñar pues no tengo noticias de que coincidieran. Muchas gracias por pasar Miquel. Un abrazo.
Me gusta lo de que la ciudad envejece cuando llega el ocaso, pienso en si mañana, amanecerá.
Siempre amanece, como un consuelo. En penumbra parece que la ciudad se viste de galas, de otros tiempos. Gracias por pasearte y comentar.
Publicar un comentario