martes, 10 de noviembre de 2009

Otro tipo de tango

Esta tarde rebusqué en un viejo armario que había en la habitación de mis abuelos. Allí enocontré tres EPs de vinilo de 45 revoluciones. El primero se titulaba "El día que me quieras", Carlos Gardel. Escuché el viejo y pequeño disco con rayones. Después escribí éste soneto:




"El día que me quieras dibujaré
un cielo de un amargo bandoneón
guiño azul neón de un triste acordeón
El día que me quieras retrataré

El día que me quieras te enseñaré
con la lágrima de un ronco saxofón
con el tango de una amarga pasión
que el día que me quieras te odiaré

Por todo lo que me has hecho sufrir
éste poema llegué a componer
esta llama que no se quiere consumir

Fuiste fiebre sin poderme reponer
cielo azul que no se llegó a abrir
El infierno que me quiso retener."


dedicado a Carlos Gardel, a mi abuelo (admirador de Gardel), en definitiva a todos nuestros abuelos que vivieron esa época y al Café "El día que me quieras" (C/La Paz, 10. Zaragoza)... donde te empecé a querer.

14 comentarios:

Crowley dijo...

La verdad es que en el baile soy un patoso, pero siempre deseé saber hacerlo para bailar como Fred Astaire y para bailar un tango.
Saludos

Marcos Callau dijo...

Lo de Fred Astaire es complicado, amigo. EL tango es un baile maravilloso. Gracias, Crowley.

Anónimo dijo...

Me gusta más el tango cantado que bailado (será porque yo tengo dos pies izquierdos...). Es más, no soporto esas genuflexiones absurdas y esos ridículos cruces de piernas en los que se ha convertido el tango arrabalero por culpa de los "académicos"; el baile sólo lo tolero como expresión de un estado de ánimo: el academicismo en la expresión corporal me parece tan estúpido como horrible.
La canción, maravillosa.

atikus dijo...

Las letras de los tangos son impresionentes, y bailarlo bien tiene que ser bonito...yo nunca supe; cuando fui a Buenos Aires (estuve una semanita) fui a varios espectáculos de tango...unos para yankis, en un sitio enorme con un show muy tocho y otro muy pequeñito en un teatro con gente de allí, que me gustó mucho mas.

Supongo que para entender el tango hay que entender al porteño, es como para entender el flamenco...hay que saber saborear un buen vino y disfrutar de andalucia..o quizás no, los japos tocan de puta madre la guitarra española jaja!!

saludos

Marcos Callau dijo...

A mí también me gusta mucho más cantado que bailado, Alfredo. Creo que, además, hay que cantarlo como lo hacía Gardel...con esa chulería casi innata. Gracias, 39escalones. Atikus, creo que el espectáculo que pudiste ver en un pequeño teatro de Buenos Aires es impagable. En cuanto a los japoneses tocando guitarra española...bueno, la guitarra española es tan bonita que la tocan bien todos. En cualquier caso, siempre prefiero cómo la toca Paco de Lucía.

Vivian dijo...

Adoro a Gardel y me encanta el tango, cantado y bailado, y me encantó el poema que ese tango te inspiró, tan pasional, tan tango…

Un beso

Raúl dijo...

Como dijo alguien una vez:
Entre boleros y tangos; unos mentirosos, otros atrevidos. Así discurre mi existencia.

Marcos Callau dijo...

Muchas gracias, Vivian, por comentar en una poesía (sé que prefieres los relatos). Muy buena frase, Raúl, muchas gracias.

Amaya dijo...

Siempre me ha parecido que los tangos tienen un "algo" sensual y, a la vez que la mayoría coincido en lo difícil de interpretarlos (bailar o o cantar) pero, dignos ambos de ver, oír, en alguna ocasión.
Me uno al homenaje a Gardel y a todos cuantos recuerdas en la dedicatoria.
El día que me quieras.... será el mejor de nuestras vidas

roberto dijo...

Gran entrada, Dana. Hay que ver cómo inspira el gran Gardel.

Marcos Callau dijo...

Muy bueno, Amaya. "El día que me queiras será el mejor de nuestras vidas", muy bueno. Gracias. Gracias, Roberto. Gardel es especial para mí, pues lo escuché mucho en mi infancia, en vinilos de mi abuelo.

Kinezoe dijo...

Gran homenaje, amigo. El tango es pasión y sentimiento. Tu soneto tiene alma de tango ;-)

pepa mas gisbert dijo...

En mi anterior blog le dedique precisamente a esta canción una entrada por diversos motivos, entre ellos porque era la favorita de mi padre y porque es si no la más si una de las mejores canciones de amor escuchadas nunca.

Un abrazo, estupendos versos

Marcos Callau dijo...

Gracias Kinezoe por el alma de tango que señalas en el soneto. Para alma, la de Alma. Tienes razón en eso de "una de las más escuchadas". Una obra de arte sin precedentes que trasciendo al género del tango. Muchas gracias.