domingo, 18 de julio de 2010

Mis libros favoritos: "Última noche en Granada" (Francisco Ortiz. 2009)


Son las cuatro de la mañana en una noche calurosa, pegajosa y más bien solitaria. En el centro de Zaragoza la madrugada se desliza lenta, como un viejo tranvía fantasma que ha olvidado su destino y este turno de vigilancia que atravieso parece no querer terminar. A través de las cámaras, de vez en cuando, me deslumbra la lenta luz de un rotativo naranja que limpia las calles desiertas mientras la ciudad duerme. En otras ocasiones el rotativo que me ciega es azul. Entonces la luz cesa y se aleja más rápidamente a la carrera por una avenida dormida y oscura, corriendo a su cita con el crimen. La vigilancia nocturna es monótona la mayor parte del tiempo pero está salpicada por estos fogonazos o sacudida por ruidos nocturnos incomprensibles que en menor o mayor medida te mantienen alerta. Esta noche en mi mesa descansa una emisora que guarda los ecos del silencio, cuatro teléfonos que sólo despiertan si hay novedad, un ordenador siempre encendido, un aparato que mueve las cámaras y un libro recién leído titulado “Última noche en Granada”.
Francisco Ortiz (Ugíjar, Granada. 1967) en ésta su primera novela, nos cuenta la historia de Luis Castillo, vigilante nocturno y ex policía, que intenta huir desesperadamente del pasado. Así como en un largo turno de vigilancia nocturna el protagonista debe andar un largo camino para librarse de una mala historia que vivió en la policía y que pesa demasiado sobre sus hombros, un ayer en el que se vio obligado a matar a un criminal, algo muy difícil de olvidar. Como si este pasado fuera poco para él, algunos ex compañeros le advierten que su vida corre peligro, pues el hermano del hombre asesinado está buscando venganza. Luis Castillo, con la inestimable ayuda de su novia Beatriz, intentará dejarlo todo atrás y comenzar una nueva vida, ahogar para siempre y en secreto su difícil y oscuro pasado. Francisco Ortiz con “Última noche en Granada” nos invita al más puro ambiente de la novela negra, describiendo de forma lírica las calles estrechas, los edificios en obras, los paisajes lúgubres y casi siempre nocturnos a través de los que discurre casi toda la acción. En realidad, toda la historia se podría definir como una pesadilla y equipararla a ese largo turno de vigilancia nocturno como si el amanecer se retrasara y no quisiera llegar nunca. Así tendríamos la última noche en Granada y ese amanecer, esa nueva vida, que se resiste a llegar. Al estar narrada por el propio protagonista el lector se llega a identificar con el propio Luis y se introduce de lleno en la historia. Lo que más me ha gustado de esta novela, además de sus inequívocos ecos de género negro, es la manera tan acertada en la que Francisco nos describe el insólito mundo de la vigilancia nocturna, los pensamientos que abordan al vigilante, sus miedos y sus inquietudes. Quizá mi profesión me ayude a destacar este rasgo de la novela pero la forma de tratar el pasado, el secreto que Luis guarda en sus entrañas y todos los miedos que acarrea en su vida es otro de los grandes aciertos que incrementan al máximo la tensión en el lector.

“Última noche en Granada” es todo un hallazgo para el aficionado a la novela negra y también muy recomendable para el lector ansioso de intrigantes historias sazonadas convenientemente con una buena carga de romanticismo. No dejen pasar la oportunidad de pasar esa última noche en Granada con el amigo Luis Castillo, de la mano del autor Francisco Ortiz.

Fin de servicio S/N

"Última noche en Granada" (Francisco Ortiz, 2009. Mira Editores)

También pueden leer una buena reseña de "Última noche en Granada" por Francisco Machuca pinchando aquí

18 comentarios:

Fernando dijo...

Gracias, amigo Marcos, por esta información tan interesante. Debes haber vivido la novela casi como propia. ¡Qué difícil debe ser estar tantas horas vigilando para que no se altere la paz de los demás! Comprendo, por los detalles que me das de tu propia vida, que el ordenador debe ayudarte mucho a sobrevivir. Enhorabuena por aprovechar tu tiempo para la lectura y el arte. Un fuerte abrazo.

El Doctor dijo...

Es una novela excelente amigo Marcos y me gusta como la reseñas con algunas gotas de tu propia experiencia,que por otra parte,son las reseñas que más me gustan.

Un fuerte abrazo,amigo.

Marisa dijo...

Carlos Ruiz Zafón decía que "los libros son espejos: sólo se ve en ellos lo que uno ya lleva dentro". Y estoy totalmente de acuerdo.
No sé si a muchos lectores les pasará, pero tendemos a leer e identificar nuestras vidas con páginas de libros que se convierten en azogue de un espejo que refleja nuestra existencia.

La sipnosis que dejas del libro es muy apetecible. Si el tiempo me lo permite, lo pondré a la cola de mis pacientes espejos.

Gracias por darnos a conocer esta obra.
Un abrazo.

Marcos Callau dijo...

Hola Fernando. Sí, la verdad es que es agradable leer una novela en el que el protagonista desempeña tu trabajo. Lo más difícil, en turno de noche, es vencer el sueño porque con cafeína se consigue pero es un arma de doble filo pues al llegar a casa resulta difícil dormir, ya sea por el sol o por los efectos del café. Un abrazo y mil gracias por pasarte.

Hola Francisco, me alegran las palabras de alguien que conoce bien el libro y ya lo había reseñado anteriormente. Un fuerte abrazo y gracias por tu opinión.

Hola Marisa. No está mal la frase de Zafón y me gusta mucho la metáfora de los espejos. Creo que el estilo en que está narrada esta novela obliga al lector a ponerse en la piel del protagonista. Merece la pena descubrir esta novela, te lo aseguro. Un abrazo y muchas gracias.

roberto dijo...

Sabía que esta novela te gustaría, Marcos. Una reseña ejemplar.

Marcos Callau dijo...

Muchas gracias, Roberto. Es cierto, me gustó mucho. Estoy aprovechando a leer bastante, estos días de trabajo nocturno. Un abrazo.

Javier Puche dijo...

Ya tenía ganas de leer este libro de Francisco Ortiz, cuyo blog sigo con fidelidad. Y ahora, con tu estupenda reseña, estas ganas se han multiplicado por mil. Gracias por contagiarnos tu pasión lectora, Marcos. Un abrazo

Marcos Callau dijo...

Hola Herman. Yo también llevo bastante tiempo siguiendo la estela de esa "aurora" que es su blog. Me alegro de haber incrementado tus ganas de leerla. Te gustará. Un abrazo, Herman y gracias por pasarte y comentar.

ANRO dijo...

Amigo Marcos, eso de la vigilancia nocturna debe de ser tremendo, no me pongo en esa tesitura...tal vez la ventaja es que puedes hacer muchísimas cosas, entre ellas leer y por lo que dices ese libro tiene muy buena pinta. Ya he comentado en algunas ocasiones mi amor por la novela negra. ¿Has leido algo de Juan Madrid?...Te gustaría.
Un abrazote.

Pepe Cahiers dijo...

Es que eso de la vigilancia nocturna da mucho juego. Las horas que no pasan, el tiempo que parece aletargado, los ruidos extraños que durante la noche parecen amenazadores y de día inapreciables. Los pensamientos, las ideas que se acumulan, la imaginación que se desborda, todo un cúmulo de sensaciones entre tu y la oscura soledad de la noche. Yo lo más cerca que he estado de esa experiencia ha sido en la mili en alguna que otra guardia o imaginaria.

Francisco Ortiz dijo...

Muchas gracias.

Marcos Callau dijo...

Hola ANRO. Para qué lo voy a negar, tiene su encanto. Leer es una buena forma de vencer el sueño y pasar las horas nocturnas, desde luego. Todavía no he leído nada de Juan Madrid. Me pondré a ello. Un abrazote.

Hola Pepe Cahiers. Por lo bien que lo cuentas parece que sea ese también tu oficio. De verdad, lo has descrito de forma excelente. Muchas gracias.

A ti, Francisco. Un placer.

Anónimo dijo...

Buena recomendación; lo voya a incluir en mi lista de libros de este verano.

Felices vacaciones!!! Un beso :-) Reina

Raúl dijo...

Mi querido Marcos. Como los buenos lectores, tú has hecho tuya (se la has robado al autor) la novela. No creo que Paco te lo tenga en cuenta.
Sonrío.
Buen libro, buena reseña.

Raúl G.R dijo...

Tomo nota del libro.

Marcos Callau dijo...

Hola Reina. Harás bien en incluírla, te gustará mucho su ambiente predominantemente nocturno. Felices vacaciones también para ti. Besos.

Hola Raúl, eso es lo que hacía Sinatra con las canciones que cantaba ... espero no haberme excedido y que a Paco no le importe jejeje. Yo no tengo la culpa de que escriba de forma tan inspirada pero también tan inspiradora. Muchas gracias Raúl. Un abrazo.

Hola Mateo. Bienvenido al Sueño eterno. Harás bien. Espero que te guste (digo el blog, porque el libro seguro que te gusta...)

Princesa115 dijo...

Hola Marcos
Gracias por tu información, tomo nota para cuando tenga algo más de tiempo.
Sabes? Me encanta la noche, tiene cierta magia...ese silencio, su olor...me traslada a un mundo lleno de paz.
En estos días, que por razones de salud de mi madre, he estado en el hospital de noche he podido sentir muchas sensaciones al mirar por la ventana la ciudad mientras dormía.

Besos

Marcos Callau dijo...

Hola Princesa. Francisco Ortiz consigue rescatar lo mejor del ambiente nocturno para su novela. Si te gusta la noche te gusta esta novela, no lo dudes. Espero que todo vaya mejor y que la próxima vez que veas dormir la ciudad sea por otras causas más felices. Besos Princesa.