“Aquel verano en Maria Luisa”
“¡Qué raudo pasó Sevilla!
Y es que se fue tan deprisa
la tarde en Maria Luisa
que quedé en la maravilla
de ese parque y tu sonrisa,
de aquel estanque dorado.
Hoy intento recordar
aquel escritor tallado
poeta inmortalizado
y hasta allí quiero viajar.”
Tierras baldías
“Reposo en el Café ignoto de olvido
tu sonrisa yerma, azul mediodía
y te pido en lienzo lluvia medido
que no conviertas en noche mi día
Eso es quimera de un héroe vencido
de tu silencio esperar melodía
de la caricia, el abrazo huido
soñar fruto en esta tierra baldía
Reposo los besos y el tiempo pasa
Se clausuran las madrugadas
Se apagan luces en la vieja casa
Cuando la tiniebla en la calle arrasa
se abrasa la última hora escasa
y yo repaso rimas malogradas.”
Fotografías del Parque de Maria Luisa, Sevilla. Rincón de Gustavo Adolfo Bécquer al que hace un tiempo ya le había dedicado esta entrada.
Marcos,amigo y poeta, un soneto es el mejor homenaje que has podido hacer. El parque de María Luisa me trae recuerdos de mi infancia. Con cinco años mi madre huyó con sus cuatro hijos de la guerra de Madrid. Nosotros vivíamos en una pensión cerca del parque y los niños jugábamos allí. Un día me llevaron al cine Juan de la Cueva y he recordado siempre con toda fidelidad ese maravilloso momento. Gracias por traerme ests recuerdos.Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarVivir en Sevilla, Fernando, debió ser una experiencia inolvidable, como lo es este precioso parque. Yo solo he visitado Sevilla en una ocasión pero espero poder hacerlo más veces porque me encantó. Mil gracias por tus palabras y tu apoyo.
ResponderEliminarUno de los lugares con más encanto de Sevilla. Precisamente hace poco me di una vuelta justo por esa glorieta y te puedo asegurar que se siente algo especial. Tu poema también es especial. Felicidades, amigo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo. Y vuelve cuando quieras a esta tierra. Te esperamos! ;-)
En efecto Kinezoe. Cuando descubrí, por pura casualidad, este mágico y sombrío rincón sentí una extraña sensación como de un tiempo pasado. Pues estoy deseando volver, amigo. Si vuelvo te aviso seguro. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLeche! Yo también me detuve un buen rato bajo la efigie de Bécquer en un viaje a Sevilla de hará tres o cuatro años. Allí, además, me puse a charlar con un uruguayo que tenía un solo brazo, de viajes, de poesía, de cine, de ciudades... Muy becqueriana la conversación, por cierto.
ResponderEliminarAbrazos.
Vaya, me alegra esa coincidencia. PArece que este rincón a todos nos resulta especial por algún recuerdo agradable. Será la sobra de Bécquer, que es afortunadamente alargada. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Marcos. Yo también visité ese rincón mágico de Sevilla hace ya unos años. Toda Sevilla es especial, hasta su olor.
ResponderEliminarPreciosos poemas, en especial el segundo.
Un beso
Hola Marcos. Mi hermano estuvo viviendo en Sevilla durante varios años, así que he podido disfrutar mucho de esta hermosa ciudad. El rincón de Bécquer es un lugar mágico al que solía ir reiteradamente. Gran homenaje de tu parte, me han gustado mucho las poesías.
ResponderEliminarUn abrazo
Precioso post,amigo.Bécquer fue para mí todo un estilo a seguir.Recuerdo que leí sus relatos toledanos y me fuí para allá.Solitario.Melancólico.Sincero.Poético.Reflexivo,etc.¿Dónde encontrar todas estas cosas hoy día?
ResponderEliminarMe repito;precioso post.
Un fuerte abrazo,amigo.
Veo que has regresado a la rima. No podía ser de otro modo homenajeando a Becquer.
ResponderEliminarEs verdad, Myra. Lo cierto es que cada ciudad tiene su aroma particular. Sevilla huele a sol, a sal y a azahar. Cada rincón es especial. Gracias Myra.
ResponderEliminarEse rincón, Silvia, tiene un ambiente muy propicio para le recogimiento. Parece que es un rincón muy visitado como veo en los comentarios. Un abrazo.
Hola Paco. En ninguna parte podemos encontrar algo parecido a lo que transmitía Bécquer. Yo aún tengo pendiente un viaje al monte de las ánimas jeje. Recuerdo ese relato por encima de todos. Un fuerte abrazo y gracias por pasar.
Hola Manchas. Bueno, es adecuado para Bécquer la rima aunque no me olvido de sus leyendas. Un abrazo y gracias por venir a leer.
Humm que ratos tan maravillosos paso aquí, en tu casa, aun cuando no te había dejado ningún comentario, creo que hoy te lo debía decir.
ResponderEliminarGracias Marcos!
El próximo martes viajaré a Sevilla por cuarta vez este año.Puedes creer Marcos que no conozco Sevilla y que mis viajes se limitan a AVE,reunión de trabajo,comida y AVE de regreso.Haré un esfuerzo por sacrificar el tiempo de la comida por ver el parque de Maria Luisa.
ResponderEliminarSaludos Marcos
que pasión por el cine,es extraordinaria...pocas veces vistas por mi,casi ninguna te diría...por pasar por el blog muchas gracias y mas por comentar...te lo agradezco tanto!
ResponderEliminarun abrazo
lidia-la escriba
No sólo la lluvia en Sevilla es una pura maravilla, desde luego...
ResponderEliminarHola Marcos, pese a que estoy cerca de Sevillla, no la conozco como a mi me gustaría. Si he visitado el parque y ese rincón de Bécquer hace unos cinco años y me quedé maravillada.
ResponderEliminarTu poema me ha encantado, eres un poeta Marcos.
Vamos es que no te falta de na, jajaj.
Besos
Pues muhas gracias Susana por decirlo en un comentario, uno nunca imagina que tiene lectores callados y encontrarse con alguien así anima y reconforta mucho. Bienvenida, aunque ya lleves un tiempo en la que llamas "mi casa" pero que también es completamente tuya. Millones de gracias a ti, Susana.
ResponderEliminarBueno Yuri, Maria Luisa bien vale un pequeño ayuno aunque no sé si te dará para conocerlo entero, pues es enorme. in mensamente también bonito es este pulmón inagotable de Sevilla y especialmente mágico y recoleto es el rincón de Bécquer. Espero que lo puedas visitar. Un abrazo Yuri.
Muchas gracias Lidia a ti por pasr y dejar tu rúbirca. Un fuerte abrazo.
Eso, eso y además bien pronunciado, como enseñaba el profesor Higgins a la señorita Audrey Hepburn en esa película que ha recordado con tu comentario. Un abrazo.
Buen, Princesa, al menos tú lo tienes cerca porque yo para volver a visitarlo, me tengo que cruzar todo el país. En fin, seguro que vuelvo. Muchísimasgracias por tus amables y dedicadas palabras. Besos.
Tengo que confesar que yo no he estado nunca allí, pero me habéis dado entre todos unas ganas enormes de visitarlo...
ResponderEliminarQué completo tu blog, Marcos.
Me quedo a seguirlo.
Un abrazo agradecido.
Todos y cada uno de los rincones de Sevilla, tan preciosa, son fuente de inspiración y un placer para los sentidos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Laura, bienvenida a este "sueño". Muchas gracias por tus palabras, es un honor tenerte aquí. Espero que pronto puedas visitar la capital hispalense y, en concreto, el inspirador rincón de bécquer en el parque de Maria Luisa. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola Pilar, tienes mucha razón. La torre del Oro, el impresionante río Guadalquivir, La Catedral, la judería, los parques, los naranjos... Sevilla es vitalmente inigualable. Un abrazo.
¡Bécquer! Lo adoro, la de “Los ojos verdes” es mi favorita.
ResponderEliminarGenial tu tributo a éste gran hombre, perfecto. La primera, como crónica de un peregrinaje hacia su escultura. Y la segunda… me ha encantado, está empapado de ti, héroes vencidos, tiempo, añoranza…
Un abrazo.
Tarde pero llego =)
Hola Crónicas...¡qué bueno verte por aquí!. Es muy aradable encontrarse con comentarios en entradas anteriores. "Los ojos verdes" de Bécquer es inolvidable también para mí, de lo qe más e gustó en su obra. un fuerte abrazo y muchas gracias.
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